27.9.09

HABLÓ FAKXIÓN

jueves 24 de septiembre de 2009


¿Qué habrá sido de aquellas cabezas que satisfacían su necesidad de expresión y libertad sólo opinando y reflexionando sobre algún disco o agrupación musical?

¿Acaso han sido forzadas a abandonar tales inoperancias bajo la esclavitud del trabajo asalariado?

¿Acaso han encontrado mejores horizonte$, nombres y temas mejor valorado$ a los que referirse?

¿Desengaño? ¿Rabia? ¿Frustración? ¿Confusión?

¿Hace cuánto tiempo que esta revista no existe?

No importa, a nadie le importa. Nunca importó que saliera o no saliera, era más bien cuestión de amistad, de actividad, de hacer por hacer.

Pero al día de hoy ¿qué hacer?

¿Qué hacen los jóvenes de espíritu que colaboraban en ella?

¿Tiene algún sentido preguntarlo o responderlo?

Parece que si.

Las personas que colaboraban en esta revista, muchos, han sido degradados por sus propias formas de vida, limitándose a pasar de meros opinadores a meros escuchas de cosas que ya no vale la pena escuchar y de cosas no tiene sentido opinar porque huelen a muerto.

Otros, quizás los más ingenuos, han caído en cuenta de lo estrecho de sus perspectivas si no lograban integrar a sus disquisiciones sobre el gusto, la tradición impuesta desde la hegemonía cultural, lo que les llevaría de inmediato, con un poco de rigor e imaginación, a considerar que sonido más, sonido menos, el problema radicaba en las condiciones contemporáneas impuestas por el capitalismo y no por elecciones libres indeterminadas. En todos los ámbitos de la vida.

De ahí a la descomposición/recomposición sólo un paso.

La música sólo puede ser el brazo sonoro de una lucha que se brinda desde todos los frentes.

Si nos reducimos a su mera contemplación y reflexión, ajena a cuestiones sociopolíticas estamos condenados a reproducir el modelo de revistas musicales catálogos de tendencias y modas, vitrina para que, en una relación cómplice, los jóvenes (de preferencia) satisfagan necesidades de consumo/identidad infinitas y el mundo de la anarquía productiva sature estas vitrinas e intente seguir inventando "revelaciones", "nuevos clásicos", "imprescindibles", etc, llenando de más mierda de nuestros ojos y oídos.

Más allá de la existencia material de esta revista, la dispersión de sus colaboradores supone, antes que un olvido o abandono, una reubicación/reagrupación de éstos -desde el lugar y momento en que han caído en el desengaño- en una tarea de crítica radical, en sus vertientes inseparables: teóricas y prácticas.


¿Creían los niños que la melomanía lo era todo, que era lo más importante?

¿Creyeron los niños que el underground los estremecería para siempre, que podrían vivir de concierto en concierto, de fiesta en fiesta, de crítica a crítica, de comentario en comentario, sin caer nunca en cuenta de lo inútil de tales placeres y compromisos y sin sentirses ya alienados de sus propias reflexiones y espectativas?

Ya se dijo hace treinta años: el nihilismo pasivo es contra-revolucionario.

La neblina trae de vez en cuando un momento casi epifánico de descubrimiento, en el momento mismo en que vemos la posibilidad de liberar cada vez más nuestras vidas -y al mismo tiempo la vida de nuestros iguales- hasta límites mínimos a nuestras necesidades de humanidad, es decir, hasta la raíz.

Luego de la autonomía individual, agruparse/repelerse junto a los otros, luchar más allá de la punta de nuestra nariz, echando abajo todo intento de desacreditación por parte de los "coherentes revolucionaristas", de los que "luchan desde siempre" y aguijonean con una supuesta autoridad moral proletarista, creando sectarismos, discusiones estériles, separación, simple ideología y considerando que la discusión teórica, no sólo en el ámbito de la política, sino del (anti)arte y la vida cotidiana, no está a la altura intelectual ni es cosa útil para la liberación de los esclavos por el imperio de la necesidad.

Las huestes anticapitalistas están en constante reordenamiento y redefinición. Ai ferri corti es el punto de inflexión. Luego de abrir los ojos y tomar la decisión, el camino sin retorno, nada ni nadie podrá lograrnos hacer creer que no tenemos nada que ver en esta lucha ni que algún día esta "moda" negativamente bella, destructivamente constructiva, negra, pero blanca, roja pero roja sangre, cambiará al ritmo de lo que indican los catálogos de los sellos musicales del "indie".

Frente a la dictadura de las sensaciones musicales fáciles: RUIDO

Frente a los dueños del arte, los mercaderes de los bello, los gusanos de los fondos estatales: ANTIARTE Y AUTOGESTIÓN EN TODOS LOS MOMENTOS DE LA VIDA COTIDIANA

Frente al dominio blanco y burgués en el gusto y la ciencia: BLACK POWER, CHAMANISMO, RECUPERACIÓN DEL CONOCIMIENTO ANCESTRAL, ESCUPITAJOS

Frente al rock progresivo y a los engreídos músicos profesionales: FREE JAZZ, PUNK NOISE, DUB COMBATIVO, RAP, IMPROVISACION EXTREMA

Frente a la democracia liberal, los dirigentes profesionales, los partidos políticos, el Estado y la Propiedad privada: COMUNISMO DESDE ABAJO, AUTONOMÍA, COOPERACIÓN, VANDALISMO

Frente a los desengañados, a los cada día más vivos y odiosos: SALUD POR EL COMUNISMO, LA ANARQUÍA, EL NIHILISMO!!


(¿¿Algo más o alguno en especial??)




Comité por la destrucción de toda noción de buen gusto, pulcritud y cooptación de la creatividad


http://fakxion.blogspot.com/

2 comentarios:

Anónimo dijo...

por qué sin firmas?, yo quiero saber qué escribe cada quien...

Marulista dijo...

lo que quería...